No nacemos aprendidos.
Con humildad, hay que estar abierto a dar lo que nos llega, y por supuesto, a recibir.
Si no damos, no esperemos recibir. Es un acto de bondad y generosidad.
No lo sabemos todo.
Reconoce que no eres perfecto, y siempre hay posibilidad de mejorar y aprender siempre. Apertura constante y asombro a lo todo que nos rodea para descubrirlo y explorarlo con curiosidad.
Y, sí, TÚ, también eres referente para otros. Admirado por tus talentos. Reconócetelos.
Eres modelo a seguir en conductas y valores. Muéstrales lo mejor de ti y sé responsable.
“TODOS SOMOS MAESTROS Y ALUMNOS.
Pregúntate ¿Qué vine a aprender y qué vine a enseñar?
El Coaching, te guiará a través del descubrimiento personal, a conocer lo mejor de ti, a mejorar lo tú necesitas, y, a conseguir lo que te hayas propuesto; Trabaja cada día en tu reto, es cambio poco a poco será visto por los demás.
Y, quizá , tras observarte, los otros quieran tu serenidad, valentía y confianza.
.Inhalo sorpresa, exhalo siempre gratitud.
Deja tu comentario