A continuación, expongo algunas claves para adaptarte mejor a tu ámbito profesional, tener una visión más positiva de ti mismo y de tu trabajo,  y  disfrutar de  unas  relaciones más  abiertas y efectivas con compañeros y clientes.

 

Vamos a por ellos;

 

  1. Ve RETOS, y no problemas; ¿cuántas veces a lo largo de tu día de trabajo escuchas la palabra; “problema”?; y ¿cuántas veces eres consciente de que la nombras? ¿qué te dice la palabra “problema”? ¿qué te hace sentir cada vez que la nombras o la escuchas? Sólo con cambiar la palabra problema por RETO, la percepción de la situación cambia. Debemos utilizar un lenguaje mas positivo para percibir las situaciones desde otra óptica. Te animo a que practiques este cambio de lenguaje y que se lo propongas a tu equipo y/o compañeros. Verás los resultados en ti y en los demás!
  2. FLEXIBLE; en estos entornos empresariales tan cambiantes y a estos ritmos tan frenéticos, necesitamos adaptarnos rápido a las nuevas situaciones o escenarios que se nos plantean en las empresas.Has pensado alguna vez ¿Cómo te enfrentas a los nuevos cambios? ¿Cómo te hacen sentir? ¿Encuentras algunas barreras?  Intenta observar las oportunidades que esa nueva situación tiene para ti, seguro que las hay. Me gusta el dicho, “lo que sucede, conviene”, aunque a veces en el momento que está ocurriendo no lo veamos, en la distancia siempre podremos obtener esta moraleja.
  3.  Sé CREATIVO; Normalmente para adaptarnos a lo nuevo, basta con verlo desde otra perspectiva, verlo “de otras maneras” de cómo lo habíamos visto hasta el momento, sino el cristal desde que miraremos será el mismo. Ante una situación novedosa, o que te sientas ofuscando, sobrepasado o no sabes cómo enfrentarte a ella, prueba con alguno de estos ejercicios; Intenta ponerte en la piel de aquel personaje (famoso o no) que admires o seas fan, y piensa cómo él se enfrentaría a esta situación ¿Qué diría? ¿Cómo reaccionaría? ; otro el ejercicio sería el de “subirse al faro”; se trata de intentar de manera figurada posicionarse en un lugar más alto desde el que observar la situación, te proporcionará una visión desde el aire, por lo tanto más global, y quizá veas otros elementos, que hasta el momento no has tenido en cuenta, por estar tan inmerso en esa situación.
  4.  CONFIA EN TI, por supuesto! Has llegado ahí por tu experiencia, recursos, formación, talentos, habilidades, capacidades, etc. recuérdalo siempre! Date valor! ERES ÚNICO. En cada reunión, interacción con compañeros, etc. da tu punto de vista desde el respeto, con buenas palabras y utilizando un lenguaje positivo ( recuerda!). Si lo ves oportuno, hazte oír.Ahora reflexiona; ¿cuál es tú nivel de confianza en el trabajo? Puntúa del 1 al 10. ¿Estás satisfecho con la puntuación? ¿Quieres mejorarlas? ¿Cómo te sentirás si alcanzaras la puntuación deseada? ¿Qué obtendrías? ¿De quien depende tener una visión más positiva de sí mismo?
  5.  ESCUCHA. La mayor parte de los conflictos en las organizaciones se debe a la forma en que nos comunicamos. Para comunicar bien, sobre todo, hay que escuchar bien al interlocutor que tenemos en frente. ( alguien decía que por eso tenemos dos orejas y una sola boca! por lo importante de escuchar, y lo poco que se enseña!). ¿Cuántas veces has estado hablando con otra persona o participando en una reunión de trabajo, y estabas pensando en tus cosas, o en la respuesta que vas a dar sin antes darle la oportunidad de oír los argumentos del otro? Hay que escuchar con los cinco sentidos, esto son ayudará a entender otros puntos de vista quizá también acertados, y/o a empatizar mas con compañeros y clientes, conocerlos más y mejor, conocer cuáles son sus necesidades y demandas. ¿Has pensado alguna vez cuál es tu nivel de escucha hacia los demás? ¿Que podría aportarte si escucharás más a las personas que están a tu alrededor? ¿Qué te está impidiendo poner atención a sus palabras, a sus gestos??   La habilidad para escuchar también se aprende y se practica; ánimo!!
  6. VIVE EL PRESENTE! La otra gran parte de los conflictos en la empresas se debe a que perdemos mucho   tiempo, recursos y energía en encontrar al culpable, o en determinar porque se llegó a esta mala situación, o porque se decidió esto o aquello, o porqué la semana pasada fulanito dijo esto de su compañero, etc. etc. Todos estos aspectos pertenecen al pasado y ya no tienen solución. Seamos más resolutivos en el presente, invirtamos las energías para la solución de tareas en el ahora! Aprendamos de lo que sucedió para avanzar y para que no nos vuelva a pasar?  Considéralo ¿de qué te sirve seguir pensando en porqué pasó o porqué lo hiciste así? ¿Puedes echar marcha atrás y retroceder en el tiempo? ¿Cómo te hacen sentir esos pensamientos recurrentes al pasado? 

 

Es importante que lo hayas leído con detenimiento, y  hayas observado  cómo eres tú en cada una de ellas, para conocer cuál es tu punto de partida. Ser consciente de un estado actual te ayudará a cambiar y/o mejorar aquello que quieras.

 

El Coaching es una herramienta muy aplicada y con grandes resultados  en el ámbito laboral, y puede ayudarte a mejorar éstos y otros muchos aspectos, si los necesitas.

Si así, aquí me tienes!  Como siempre ….

 

Inhalo sorpresa, exhalo siempre gratitud.