A pocas horas de disfrutar de las vacaciones…tengo por delante un montón de días, para como dice mi amiga Sara; “asumir el gran reto de disfrutar ,descansar y desconectar a partes iguales”. Y, por supuesto, que asumo ese reto!!

Como yo, seguramente alguna de vosotras ya tenéis en mente o escrita la lista para que no se olvide nada. (Un apunte; escribir ayuda al celebro a sellar y recordar) Lista de lo que debes llevar a la casa que has alquilado, una lista con la ropa que tienes que llevar en la maleta, lista de los accesorios para practicar tu deporte favorito, la lista de spotify que vas a poner en el viaje, lista de los lugares y restaurantes que tienes que visitar, la lista de los medicamentos para los niños por si acaso, etc.

Creemos que con la realización de estas listas tenemos todo organizado y preparado para pasar unas vacaciones estupendas. Unas vacaciones donde nada puede fallar. Perfecto.

Me encantaría que leyeras de nuevo la lista de lista que hemos mencionado. Si lees bien, todo lo expuesto, tiene que ver con sobre todo con cosas materiales, cosas externas, ajenas a nosotros mismos. Por supuesto que nos ayudarán a estar de buen humor y pasarlo bien, pero como en cualquier situación, todo lo que ocurra dependerá de la actitud y de los “ojos” con los que miremos esa realidad en la que vivimos.


Atención pregunta importante ¿tienes una lista para aquellas cosas que dependen de ti para realmente desconectar y pasar unas felices vacaciones? ¿Has pensado en aquellas situaciones que te restan energía en vacaciones? Aquellas experiencias que año a año se repiten y no haces nada para remediarlo.

¿Cómo vas a afrontar esas situaciones? ¿Cómo vas a preparar tu mente para “mirar” desde otro lado? ¿Identificas las emociones que sientes en esos momentos? ¿En qué parte de tu cuerpo las sientes?¿Qué ideas o mensajes ocupan repetidamente tu mente una y otra vez? ¿Qué palabras salen por tu boca en esas situaciones? ¿Cómo vas a preparar tu cuerpo para ayudarle a descansar?

Y, has pensado en aquellas cosas que te restan tiempo de calidad para disfrutar… ¿Cuánto tiempo vas a dedicar a mirar y consultar tú móvil? ¿El ordenador está en esa lista previa que has preparado?¿?

Y, para disfrutar aún más ¿Has reservado algún momento para ti? ¿Qué cosas te vas a permitir? Con la condición de no reprochártelo ni en el momento presente ni futuros? ¿Has elaborado una lista de lo que quieres realmente hacer?

 

Piensa. Tomate tu tiempo. Es importante identificar aquello que nos exaspera y nos enfada. Aquello que no nos deja ver los instantes maravilloso que nos ofrece el día y saca a relucir nuestra peor versión de nosotras mismas. Sólo tú sabes cuando se producen y los efectos que tienen sobre ti y sobre las personas que comparten contigo esos días. No te lleves el mal humor de vacaciones.

Te propongo una pequeña lista que puede ayudarte a disfrutar aún más del verano, de tú verano. Pequeñas cosas que “suben el buen humor “:

 

  1. Reír cada día. Cuando nos entrenamos para sonreír a la vida, la vida nos sonreirá.
  2. Pasear en silencio. El silencio nos ayuda a conectar por dentro y por fuera. Lo recomendable es hacerlo de manera frecuente. Un poquito de actividad sí, no hace falta agotarse y llegar desfallecida. A tu ritmo está bien.
  3. Saborear con los cinco sentidos un helado. Cuando hace calor, nos gusta el contraste con el frío. El helado hace entrar iones de calcio en los nervios que parten de la boca y cuanto más calor hace más placentero nos resulta el frescor del helado. La sensación del frescor en la boca provoca buen humor.
  4. Respirar. Cualquier sitio y momento es válido para respirar; en el coche, en la cama, caminando, en la playa, etc. Sólo con tres respiraciones largas y profundas hará que aumentemos la sensación de bienestar.
  5. Ponte música y baila. La música potencia nuestros sentidos. Bailar nos hace sentir activos y alegres. No te prives de bailar y dale a tu cuerpo “alegría macarenaaa”
  6. Aprende a olvidar en vacaciones. Centra tus energías en el presente y olvida aquello que te produce dolor, angustia y enfado, pasado y/o futuro. Estas de vacaciones! Vive el hoy. Permitirse olvidar es un placer sin límites; de hecho es más natural olvidar que recordar
  7. Un pequeño diario de emociones positivas: anota los momentos alegres de cada día. Seguro que de anteriores vacaciones tienes un montón de fotografías .Está bien esa galería pero quizá mejor si lo complementas con alguna lista de momentos memorables que te hicieron realmente feliz. (recuerda de nuevo, que escribir ayuda al celebro a recordar… y puedes tenerla a mano en cualquier momento para volver a “recargar las pilas!

 

Ahora mismo soy más consciente de que aún me faltan por preparar algunas cosillas más para mi próximo viaje. Disfrutaré realizándolas espero que tú también! J

Feliz verano. Hasta septiembre!!!

Inhalo sorpresa, exhalo siempre gratitud.